Cuando la generación del 88 se juntó en Dinamarca

Este fin de semana es la cita. Comienza el campeonato europeo de selecciones nacionales sub-21 en tierras danesas. Los mejores nombres menores de 23 años (hasta los nacidos en 1988, estos incluidos) se citan con las camisetas de sus respectivos países para demostrar su talento y mostrarse en el escaparate mediático en busca de grandes clubes que los acaben de criar y de potenciar.

Tras un proceso de clasificación extraño pero apasionante, los grandes nombres que oímos cuando se habla de selecciones absolutas han demostrado tener cantera insuficiente o quizá no tan buena como la de las potencias emergentes que veremos en el campeonato que comienza el sábado en Aarhus. Me estoy refiriendo a las selecciones bielorrusa, islandesa, ucraniana e incluso, checa y suiza. No están ni Holanda, ni Alemania, ni Italia, ni Escocia... y así una lista considerable de selecciones que han sido doblegadas por estas cuatro antes mencionadas.

Solo quedan dos de las consideradas "grandes potencias" europeas en este campeonato: España e Inglaterra. La primera se presenta en Dinamarca con nombres que ya juegan en el primer nivel de la Liga BBVA. Demuestra que tanto en la absoluta como en las categorías inferiores juega siempre al deslumbrante estilo que llevó a la consecución de la EURO 2008 y del Mundial 2010, un juego de toque, de precisión y de creatividad brutales que se culmina en jugadas asociativas en las que interviene todo el equipo y que con velocidad marca goles. La segunda se presenta con una cosecha de jugadores muy técnicos y precisos que intentarán demostrar que la calidad mejora el grupo luchando por conquistar este título.

Recordar, antes de analizar, que el top 3 del torneo (finalistas y tercer clasificado, Inglaterra no cuenta) clasificarán a las selecciones sub 23 de sus países para los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

Análisis particular:

GRUPO A

• Bielorrusia: segunda aparición en una Eurocopa de esta categoría. Ya estuvieron en la cita anterior de Suecia 2009, pero este año, su clasificación fue más sorpresiva. Después de perder 2-0 en la ida contra Italia lograron sobreponerse con solvencia ganándoles en la vuelta por 3-0. A Dinamarca llegan con un hándicap importante, la lesión de uno de sus artilleros más precisos, el delantero de Shakhtsyor Vladimir Yurchenko. Sin embargo, presentan jugadores de categoría en todas las líneas: Syarhey Palitsevich, Yury Astravukh, Egor Filipenko o Aleh Veratsila en defensa o Dzmitry Rekish, Mikhail Sivakov o Mikita Bukatkin en el mediocampo. Sin embargo, tendrán un grave problema arriba con la baja de Yurchenko, y es que el resto de delanteros puros que les quedan son Maksim Skavysn y Andrey Varankow. La otra alternativa se llama Uladzimir Khvashchynsi, más joven que estos dos nombrados y con menos convocatorias, pero que puede rendir también a un muy buen tono.

 

• Dinamarca: los anfitriones plantean un equipo donde su mayor estandarte está en el medio campo, y se llama Mike Jensen. Tiene también una plantilla equilibrada en todas las líneas, con nombres como Mathias Zanka Jørgensen, Anders Randrup, Daniel Wass o Lasse Nielsen en defensa, buenos centrocampistas (además de Jensen) como son Kasper Povlsen, Matti Lund Nielsen o Mads Albæk y delanteros eficaces en su función, como son Nicki Bille o Nicolaj Agger, los que se presumen titulares en más ocasiones y los que mayor nivel tienen. Sin embargo, tienen dos muy jóvenes a descubrir, como son Bashkim Kadrii (19 años) y Nicolai Jørgensen (de 20), sin apenas convocatorias pero que, si se turnan junto a Søren Frederiksen, serán los jugadores ofensivos a analizar.

 

• Islandia: clasificada tras doblegar a Escocia por 2-1 tanto en la ida como en la vuelta. Tienen nombres que enamoran en todas las líneas, lideradas por Gylfi Sigurðsson y el "veterano" Bjarni Þór Viðarsson, ambos centrocampistas creativos de un nivel muy alto. Pero es que en defensa disponen de jugadores como Hólmar Örn Eyjólfsson o Skúli Jón Friðgeirsson, que además de Sigurðsson y Viðarsson tienen mediocampistas valiosos como Birkir Bjarnason, Aron Gunnarsson o Guðmundur Kristjánsson y finalizan arriba con tres delanteros exquisitos como son Jóhann Berg Guðmundsson, Kolbeinn Sigþórsson y Alfreð Finnbogason que, seguramente, se alternarán durante todo el torneo ocultando otros nombres de jugadores buenos -aunque no tanto como ellos- como son Arnór Smárason y Björn Bergmann Sigurðarson. Se presentan con una plantilla de enorme potencial que dará mucho que hablar.

 

• Suiza: Pierluigi Tami ha logrado aunar a una generación de futbolistas de mucha calidad en tan solo una generación. Jugadores cuyos nombres ya se conocen a nivel mundial por haber jugado ya con la selección absoluta y por haber destacado en ella con su calidad. En mi opinión, lo mejor de Suiza son sus atacantes, Mario Gavranović, Nassim Ben Khalifa y Admir Mehmedi, así como los centrocampistas ofensivos que rinden como si estuviesen más adelantados, casos de Xherdan Shaqiri, Fabian Lustenberger, Granit Xhaka o Pajtim Kasami. El nivel defensivo también es elevado y sólido, con hombres como Philippe Koch, Fabio Daprelà o Timm Klose. Llevan la vitola de favoritos del grupo, aunque deberán de pelear para demostrarlo.

GRUPO B

• República Checa: se planta en suelo danés después de eliminar a una no tan fuerte Holanda en el global gracias al valor doble de los goles en campo contrario (global de 3-3). Son un grupo que plantea ponerles trabas a las favoritísimas España e Inglaterra para que la fase de grupos no sea un paseo o un calentamiento. Presentan una generación con nombres llenos de calidad individual que forman una selección que, si carbura y no vive demasiado de las individualidades, puede ser muy peligrosa. Los nombres más destacados: Marek Štěch (junto a Tomáš Vaclík, aunque éste en menor grado) en puerta, un buen seguro; Ondřej Mazuch, Ondřej Čelůstka, Lukáš Vácha o Marek Suchý en defensa, éste último se mostró como un muy buen defensor en un partido de Europa League en la que su Spartak no tuvo mucho que hacer (derrota 5-1) pero que, saliendo en los últimos minutos, deslumbró frenando a los Hulk, Radamel Falcao y compañía. En el mediocampo, hablar de Jan Morávek, Bořek Dočkal o Lukáš Mareček es casi tarea obligatoria. Centrocampistas de calidad, con visión de juego y creatividad ofensiva, piedras angulares de la proposición checa. Arriba, los nombres a destacar son Tomáš Pekhart, Libor Kozák, Michael Rabušic y un jovencito llamado Václav Kadlec (19 años) del que hablan ya maravillas.

 

• Inglaterra: segunda favorita para la consecución del torneo. Se clasificó, no sin sudar, ante una buena selección rumana que le apretó las cuerdas en ambos partidos (global de 2-1). Lo peor que le acontece en sus filas son las lesiones que se están conociendo en los últimos días y que afectan a jugadores destacados de mediocampo y defensa. Los nombres nos suenan a todos: Chris Smalling, Kieran Gibbs o Michael Mancienne atrás, Fabrice Muamba, Marc Albrighton, Jordan Henderson, Scott Sinclair o Tom Cleverley en el centro y Danny Welbeck, Daniel Sturridge o Nathan Delfouneso arriba. Muy buena plantilla, pero deberán superar esa dificultad añadida de las lesiones en los días previos que están sucediéndose.

 

• España: plantilla amplia, creativa, potente y efectiva en todas sus líneas. Poco más se puede añadir. Se clasificó tras ganar con solvencia (5-1 en el global) a Croacia, y los nombres son incuestionables: David de Gea, César Azpilicueta, Álvaro Domínguez, Javi Martínez, Jeffrén Suárez, Dani Parejo, Bojan Krkić, Juanma Mata, Diego Capel, Ander Herrera, Thiago Alcântara, Botía, Víctor Ruiz, Iker Muniain o Dídac Vilà, entre otros.

 

• Ucrania: le pegó la sorpresa a Holanda en la clasificación. Sus nombres no son tan técnicos y de tanta calidad como el resto de selecciones clasificadas -su nivel se asemeja al bielorruso- pero ha venido a Dinamarca para crecer. Defensores efectivos como Yevhen Selin, Yaroslav Rakitskiy u Oleksiy Kurylov, mediocampistas que cumplen bien con la función box to box como Taras Stepanenko, Yevhen Konoplianka, Mykola Morozyuk, Volodymyr Chesnakov o Valeriy Fedorchuk, y delanteros que suenan algo más a nivel mundial como Andriy Yarmolenko, Roman Zozulya o Artem Kravets, conforman una plantilla plena de jugadores de la Premyer Liha pero que cuentan para sus equipos, muchos de ellos de alto nivel, como los mismísimos Shakhtar Donetsk y Dynamo Kyiv. Son la gran incógnita -junto con Bielorrusia y los anfitriones- del campeonato, y tendrán que dar la nota en un grupo en la que son candidatos a la última posición.