Se acerca. Está casi encima. Es el segundo partido más importante a nivel de selecciones del año 2012, sólo por detrás de la Final de la Eurocopa de Polonia y Ucrania de este verano. Sus contendientes son de perfiles bien diferenciados, lo que garantiza que cuando se escuche el pitido inicial en Libreville comenzará un choque imperdible. Un contendiente es Costa de Marfil, analizado en un post anterior, la otra es Zambia, los Chipolopolo, la sorpresa y revelación indiscutible en cuanto a equipo de la Copa de África de Naciones que hoy cerramos.
En las clásicas predicciones de "fútbol ficción" que se hacen al comienzo de los torneos, pocas sorpresas caben en las mismas. No obstante, es el fútbol el encargado de propiciarlas. Partían como candidatos al segundo puesto de su grupo por detrás de Senegal y lo acabaron ganando, y en las eliminatorias se han aprovechado del camino "fácil" que les ha tocado en lo que al cuadro se refiere.
Es importante destacar qué armas tiene el conjunto del ya famoso Hervé Renard, al que difícilmente pensábamos al comienzo del torneo ver aquí. En cambio, depositando la confianza en un bloque más o menos fijo y con un planteamiento atrevido, superaron en Semifinales a una Ghana superior que no supo gestionar las situaciones que se distinguieron durante el partido y que les llevó a caer pese a fallar gran cantidad de ocasiones.
Una de esas armas de las que dispone Zambia es una pareja que ha demostrado entenderse a la perfección en el 4-4-2 clásico (a veces adaptado a 4-4-1-1) instaurado por Renard. Concretamente, la asociación entre Kalaba y Emmanuel Mayuka. El centrocampista ofensivo de banda izquierda del TP Mazembe y el joven punta, revelación de la Copa, propiedad del BSC Young Boys, han dejado claro que, si se entienden sobre el césped, Zambia tiene mucho peligro por el perfil izquierdo, con triangulaciones y jugadas de asociación muy rápidas que suelen acabar siempre con disparos con mucho peligro de Mayuka.
Sin embargo, no sólo de esto vive Zambia. El mítico Chris Katongo no ha faltado a su cita con la selección y, en la que está siendo su cuarta CAN con los Chipolopolo –tras Egipto 2006, Ghana 2008 y Angola 2010– está demostrando su valía como delantero con gol y movilidad. Y es que la variación posible del esquema táctico de Zambia se debe a su polivalencia y variedad posicional. El delantero del Henan Construction chino es un punta que no sólo rinde colocado como un '9' clásico, sino que ha rendido de manera muy positiva estando de segundo punta en algunos partidos, y ha servido en varias ocasiones para conectar a la clásica pareja del centro del campo Sinkala-Chansa con los hombres de ataque. Suma 3 goles de los 9 que ha marcado Zambia hasta hoy, los mismos que Mayuka en esta CAN.
Respecto a su filosofía de juego, es cierto que Zambia es un equipo con pegada y llegada, pero para lograrla se ve obligada a jugar muy abierta. No hay líneas de presión sólidas, no preocupa en exceso que el rival tenga la iniciativa. De hecho, el partido donde más se pudo apreciar es en la sorprendente Semifinal ante Ghana, donde sus mediocentros (Annan y Derek Boateng por la lesión de Agyemang-Badu) pudieron trabajar sin oposición en la medular.
(Zambia no presiona y deja espacios en el centro del campo para que el rival elabore en los mismos)
Usa las bandas como vías de ataque, recurso principal priorizado sobre la opción del juego interior –ya que tampoco Sinkala y Chansa son jugadores asociativos–, lo que permite que los laterales se desplieguen y cobren importancia en el apartado ofensivo. Pese a todo, estos laterales, tanto Musonda como Nkausu, se ven desbordados en las tareas defensivas. Las distancias con los centrocampistas de banda que podrían retroceder para ayudarles es excesiva debido a su marcado carácter ofensivo (Kalaba por izquierda y Kasonde o Lungu por derecha). Los rivales que les han robado pases en el centro del campo y han penetrado por bandas han podido apreciar esta debilidad. Musonda y, sobre todo Nkausu, se quedan desasistidos y se ven desbordados, tanto que es fácil dejarlos atrás y disparar a la portería de Mweene. También se debe, en parte, a que Sinkala y Chansa retroceden para ayudar a los centrales pero con algo de retardo debido a su preferencia de seguir las jugadas ofensivas.
Ante Ghana salió bien cederle la posesión del balón y la iniciativa total en el juego, pero con muchísima suerte, ya que Asamoah Gyan falló un penalti en el minuto 7, Ghana mandó fuera o a las manos de Mweene todas sus ocasiones, que fueron cuanto menos cuantiosas, Mayuka marcó un golazo para la historia del fútbol de su país y Stevanović realizó 2 sustituciones cuanto menos destacables –retirando a Gyan (el mejor del ataque) y André Ayew (el mejor de Ghana en general) con 1-0 en el marcador– que le han costado la no renovación. Las Estrellas Negras vivieron posiblemente –y pese a la derrota– su partido más cómodo en la Copa de África, debido a esta cesión de iniciativa y grandes áreas para la elaboración de juego en el centro del campo por la permisividad (o no-presión) de Zambia. La sensación inicial que da es que si repite estos fundamentos ante Costa de Marfil y Zambia prefiere dejar jugar a los Elefantes, podría salir seriamente dañada, aunque, a falta de unas horas para la Final, no deja de ser "fútbol ficción".
No hay comentarios:
Publicar un comentario