miércoles, 7 de septiembre de 2011

El estado actual del fútbol español

La situación actual del fútbol español no para de generar debates y ríos de tinta desde principios del mes de agosto, y se ha multiplicado después de analizar los resultados de la segunda (primera) jornada de la presente campaña de la Liga BBVA. El campeonato que organiza la Liga de Fútbol Profesional está viviendo momentos de zozobra y de cuestionamiento popular por diferentes situaciones que coinciden en el tiempo. Son un total de 4 puntos fundamentales que paso a explicar:

1. La huelga de la AFE para las dos primeras jornadas del fútbol profesional español

El pasado 11 de agosto, Luis Rubiales, presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), convocaba una huelga para las dos primeras jornadas de la Liga BBVA y la Liga Adelante con estas palabras: "La AFE y todos los futbolistas de Primera y Segunda División hemos tomado la decisión responsable, firme y unánime, de convocar una huelga para las dos primeras jornadas del campeonato. La Liga no dará comienzo hasta que no se firme un nuevo convenio colectivo". Las reformas que el sindicato de futbolistas le solicitaba a la patronal y organizadora de ambos torneos, la Liga de Fútbol Profesional (LFP) venían promovidas por el aumento de 100 a 200 futbolistas profesionales que vivían impagos por parte de sus clubes, ya fuesen nóminas adeudadas anteriormente o una situación en la que llevaban un tiempo sin cobrar lo estipulado en su contrato. La cantidad adeudada, según hizo saber la AFE, había pasado de los 12 a los 50 millones de euros, cifras que les movieron a plantear esta huelga. La petición de la AFE se desdoblaba principalmente en 2 vertientes:

  • Una muy general: el asegurarse de alguna manera que las cantidades adeudadas a los jugadores comenzasen a pagarse, y tratar de evitar que vuelva a haber impagos a futbolistas. La manera de llevarlo a cabo sería mediante la reforma del fondo de garantía salarial, firmado apenas unos días antes de la convocatoria de huelga. Este fondo consiste en una cantidad reunida por todos los equipos de Liga BBVA y Liga Adelante para que si se dan situaciones que impidan cobrar a los jugadores, mediante este fondo se puedan pagar las cifras acordadas (o parte) en sus contratos. Las cifras iniciales contaban con la existencia de un tope de 240.000€ por jugador de Liga BBVA y de 120.000€ si el futbolista juega en la Liga Adelante. La AFE entendía que estas cantidades eran insuficientes y el aumentarlas podría solucionar el problema de esos 200 futbolistas, ya que sumados, estos números no alcanzaban los 50 millones adeudados actualmente.
  • La otra, algo más específica y que no se culminó tras la desconvocatoria de la huelga, era una petición de AFE al sistema judicial que regula el fútbol español.
    Tras la transformación de todos los clubes de fútbol de España –salvo Real Madrid CF, FC Barcelona, Athletic Club y CA Osasuna– en Sociedades Anónimas (Deportivas) a comienzos de la década de 1990, la manera de entender a los clubes deportivos jurídicamente cambió: pasaron a ser empresas en las cuales los accionistas son los que gestionan económicamente el club por el hecho de poseer parte del paquete accionarial de los mismos. Mediante las normas judiciales que existen en España, todas las empresas que son sociedades anónimas (deportivas o no), en caso de quiebra –caso de bastantes equipos de Liga Adelante, categorías inferiores e incluso algunos casos de equipos de la actual Liga BBVA– se pueden acoger a la llamada Ley Concursal, mediante la cual se crea un concurso de acreedores, expertos en la parcela económica, que controlan económicamente al club limitando sus gastos y controlando sus ingresos tratando de salvar a las entidades durante un periodo de tiempo. Existe un recoveco en el sistema que permite que los clubes (empresas, ya que son tratados por igual) que están en Ley Concursal puedan posponer temporalmente los pagos de las nóminas a sus empleados debido a este "bloqueo económico". Por ello, pueden declarar públicamente que no hacen efectivos a tiempo los pagos de esas nóminas y generar deuda con los mismos. AFE denuncia esa generalización considerándola indebida. El hecho de que se considere completamente a los clubes como empresas permite que los equipos –alegando que están en Ley Concursal– puedan salir impunes del impago a sus futbolistas. Solicitaron que la Ley del Deporte, la cual dictamina que los clubes que no pagan a sus futbolistas descienden de categoría, volviese a prevalecer sobre la Ley Concursal. El último caso en el que se aplicó como tal fue en la temporada 1992-93, cuando se descendió administrativamente al CE Sabadell a la Tercera División por el impago a sus futbolistas. Quizá por cómo se puso la situación durante la negociación y ante el cumplimiento de la huelga en la primera fecha del campeonato, AFE decidiese renunciar a este punto para acercar posturas con LFP que, en cualquier caso, sigue siendo una de las peticiones principales de la asociación pese a que no se haya concretado nada en esta huelga.

Las negociaciones entre LFP y AFE fueron tensas. La patronal en un primer momento no comprendía la medida tomada por AFE, como dijo ante la prensa su máximo dirigente, José Luis Astiazarán, pero poco a poco tuvieron que irse reuniendo y acercando posturas –hasta 7 veces– para que, tras la más tensa reunión, (la del 24 de agosto que duró desde las 16:00 hasta las 5:10 aproximadamente) se produjese el ansiado acuerdo. La ampliación del fondo de garantía salarial a una cantidad mayor de la adeudada actualmente para los próximos cuatro años por parte de LFP permitió que AFE cediese y sólo se tuviese que suspender la primera jornada de Liga BBVA y Liga Adelante. "Queda solucionado el problema de esos 200 futbolistas. Estamos muy contentos y muy satisfechos por este acuerdo", cerraba Luis Rubiales. Todo esto se hizo público el 25 de agosto, al igual que el reajuste de calendario:

- En Liga BBVA, la jornada 1 (20 de agosto) pasa a ocupar la fecha de la jornada 20 (21 de enero) y la jornada 20 se pasa a disputar entre la 36 y la 37 (2 de mayo).
- En Liga Adelante, la jornada 1 (20 de agosto) pasa a ocupar una fecha entre semana y a jugarse entre la 10ª y 11ª jornada (26 de octubre).

2. Las desigualdades entre clubes, la Liga de 2, la competitividad, las comparaciones y los repartos televisivos

Este es un tema que lleva dando especialmente de qué hablar en las últimas fechas, sobre todo tras comprobar que en la segunda (primera) jornada de la Liga BBVA, los dos clubes más grandes del país, Real Madrid CF y FC Barcelona, comenzaban la temporada con sendas goleadas por 0-6 al Real Zaragoza y 5-0 al Villarreal CF, cuarto clasificado la pasada temporada y equipo que disputa la UEFA Champions League. Y todo esto a finales del mes de agosto, con deficiencias en el nivel físico de algunos jugadores por la sobrecarga de partidos o la falta de adecuación al ritmo regular de la competición. La polémica ya existía desde hace bastantes meses, pero estos resultados llamativos (sobre todo por el del vigente campeón, por la entidad de su rival) hicieron que se generase un auténtico movimiento de protesta ante la que parece ser ya la "Liga de 2". El hecho de que deportivamente el acceso al título esté cerrado y reservado, bien para Real Madrid CF o bien para FC Barcelona reducen la competitividad de la máxima categoría del fútbol español. En comparación con otras ligas, particularmente con la Premier League inglesa o la Ligue 1 francesa, al comienzo de la temporada suele haber 4 ó 5 equipos que pelean hasta las últimas jornadas por el título, llegando incluso en los últimos años ha tener una nómina de 6 ó 7 aspirantes de los cuales la lista se iba reduciendo con el paso de los meses de competición.

Hubo un fructífero periodo en el comienzo del siglo XXI donde la competitividad del campeonato aumentó de forma aislada pero exponencial, dejándonos títulos ligueros del Deportivo (1999-2000) y del Valencia CF (2001-02 y 2003-04). Se quedó en espejismo. Hubo periodos parecidos con similar duración anteriormente (Atlético de Madrid en los 70 y en la 95-96, Real Sociedad entre 1980 y 1982 y Athletic Club entre 1982 y 1984) en los que la sensación de que podía haber equipos "alternativa" cobraba fuerza, pero también se quedaban en meritorias hazañas que aprovechaban momentos débiles de madridistas y barcelonistas para llevarse títulos a sus vitrinas. Habría que remontarse ya a los 30 y los 40, con la Liga recién nacida para encontrar igualdad total y títulos de otros equipos. Desde entonces, el dominio de Real Madrid CF y FC Barcelona ha permanecido siempre vigente salvo en estos pequeños momentos históricos en los que surgieron alternativas. La realidad con la que nos topamos ahora es que esta diferencia histórica se ha ido a límites insospechados, con más de 20 puntos de diferencia entre estos dos clubes y el tercer clasificado, y a que campeón y subcampeón de Liga rebosen los 90 y se acerquen a los 100 puntos. La última alternativa que surgió fue el Sevilla FC en la temporada 2006-07. El hecho de que el acceso al título esté reservado para 2 debilita el valor general de la Liga española en el sentido de que cada vez se aleja más del concepto de "liga" propiamente dicho.

Hay dos tablas que miden el "valor conjunto" de las ligas europeas. Una de ellas es la de la propia UEFA (creada en 1960), cuya clasificación por coeficientes acaba determinando –incluyendo, eso sí, las participaciones de los clubes en Europa– cuáles son las mejores ligas del continente, su orden concreto y la definición los cupos para las competiciones europeas que ellos mismos organizan. Por este último punto esta tabla es o debería ser de forma general la vara de medir a la hora de comparar el campeonato español con otros del extranjero, la tabla realmente vigente y no anecdótica por lo que determina (cupos europeos). Y si nos fijamos en esta misma, la Liga Española sólo ha sido la mejor de Europa en dos periodos: entre 1960 y 1967, donde aunque los campeones ligueros eran los que ahora forman polémica, la representación de los clubes españoles por Europa era notoria y con títulos; y entre 2000 y 2007, coincidiendo con este periodo de competitividad y abertura que protagonizaron Valencia y Deportivo y que cierra el intento de obtención del título por parte del Sevilla, el último "alternativa". Algo que hay que especificar de este ranking es que los puntos son acumulativos temporada a temporada, y va analizando minuciosamente cada año.

En cambio, la otra tabla, la que permite seguir diciendo que la Liga española es la mejor del mundo es la de IFFHS (creada en 1991), con una manera de puntuar diferente, considerando el número de puntos de los clubes en cada Liga y las actuaciones de sus clubes en las Copas nacionales y continentales. Obviamente, con las cifras que han conseguido últimamente Real Madrid CF y FC Barcelona, de record en algún caso, los cálculos sitúan a la Liga BBVA como la mejor en los años naturales de 2010 y 2011. Pero aún así, esta tabla ha dictaminado en años pasados que el campeonato español no era el mejor "numéricamente hablando", llegando en ocasiones a desaparecer del top-3 mundial por culpa de la Primera División Argentina, el Brasileirão, la Serie A o la Ligue 1. De hecho, según esta tabla, la Liga ha sido la mejor en los años naturales 2000, 2001, 2002, 2004, 2010 y, ahora, 2011.

Más allá de números, la cuestión de fondo reside en resolver el por qué de estas distancias actuales. Uno de los motivos mirando a otros campeonatos es el reparto de los ingresos televisivos. Mediapro es la empresa tenedora actualmente de los derechos de imagen del fútbol español. Las cantidades que se pagan a los clubes ronda aproximadamente los 610 millones de euros. La jurisdicción actual en España no es la misma que en otros países como Italia, donde se obliga a que se negocien de forma colectiva entre todos los clubes y el tenedor de los derechos. Los acuerdos en España los realiza el operador televisivo de forma directa con los clubes, y el criterio que aplica el operador suele ser el del reparto de esta cantidad en función de lo que los propios clubes generan mediáticamente, esto es, en función de las audiencias; ya que a diferencia de en otras ligas, los partidos de algunos clubes de Liga sólo los ven sus propios aficionados y un pequeño grupo de telespectadores más, mientras que partidos de FC Barcelona o Real Madrid CF mueven cantidades de audiencia mayores y, por tanto, reportan mayor beneficio. De esta forma, el reparto televisivo queda desigualado entre: Real Madrid CF y FC Barcelona, un segundo escalón conformado por Atlético de Madrid y Valencia CF, un tercer peldaño compartido por Villarreal CF, Sevilla FC y Real Betis, y el resto. Las cifras son notablemente diferentes como se aprecia en el gráfico, un gráfico elaborado por el site web "Fórmula TV" que compara los repartos televisivos de la presente campaña de la Liga BBVA con la Premier League (2010-11), la Ligue 1 (2009-10) y la 1. Bundesliga (2009-10):

Tenemos 3 maneras de entender el reparto diferentes a cómo se hace en España:

  • El de la Premier League, que con más de 1000 millones de euros a repartir, lo hace de manera equitativa aunque no directa –esto es, atendiendo a la clasificación liguera de la temporada anterior– en el que la diferencia del primer al último clasificado es menor que en España y el sistema es algo más flexible al no considerar apenas la deuda.
  • El de la Ligue 1, que imita el modelo inglés aunque con menos dinero a percibir por los clubes y con algo más de diferencia entre primero y último.
  • El de la 1. Bundesliga, donde con menores cantidades a las que se reparten en España, respetando el orden de la tabla, se reparte de forma muy igualitaria, sin diferencia sustancial entre primero y último, y donde los ingresos de televisión no son vitales para las economías de los clubes como ocurre en España, sino que son tan solo un tercio de sus economías.

Explicado de forma muy parecida, el periodista salvadoreño de ESPN Fernando Palomo analiza la situación en un vídeo recomendable que se puede ver haciendo click aquí.

Debido a que los ingresos televisivos, como consecuencia de las gestiones internas de las economías de los clubes –que incluyen algunos fallos como la falta de patrocinios para camisetas–, resultan vitales para los equipos de media y baja tabla de la Liga BBVA y son la manera de acercarse deportivamente a los grandes por parte de equipos como Sevilla FC, Villarreal CF o Real Betis, la disconformidad con el reparto no ha tardado en surgir. De hecho llevaba existiendo ya un tiempo atrás, aunque no con tanta fuerza como ocurre ahora. Los clubes del tercer escalón antes mencionados y algunos más (unos 7 clubes en total disconformes desde hace ya tiempo) entienden que si Real Madrid CF y FC Barcelona se siguen embolsando esas cantidades, además de la coincidencia histórica de una generación de futbolistas espectacular en el club catalán, las cuentas de estos clubes seguirán siendo enormes comparadas con las suyas, por lo que los clubes de la "Liga de 2" podrán comprar a jugadores de mayor perfil o, incluso, si se mantiene esta racha de fortuna histórica del FC Barcelona, a estos fichajes añadirles talentos de cantera que harían que la distancia clasificatoria entre ellos y los otros 18 clubes de la máxima competición en España sería escandalosa.

El contrato firmado actualmente con este reparto (el del gráfico) finaliza en la temporada 2013-14. Para entonces, la LFP (los clubes) ya han aprobado un nuevo contrato en el cual el dinero a repartir se eleva progresivamente hasta los 800 millones de euros (190 más de los que ahora se reparten) durante el periodo de validez del contrato (2014-2020), y en el que Real Madrid CF y FC Barcelona acceden a congelar sus ingresos televisivos actuales (anclarse en los 140 millones de euros) para que el dinero que el operador televisivo va a ir añadiendo a mayores se vaya repartiendo entre los clubes y sirva para la apertura de un fondo por el cual los clubes que descienden a la Liga Adelante tengan un primer año de ingreso televisivo de unos 13 millones de euros, ya descendidos, y evitar así posibles desapariciones de clubes. El problema de este nuevo contrato, entienden los clubes disconformes, está en que aunque las diferencias con respecto a Real Madrid CF y FC Barcelona se reduzcan, por el mero hecho de que hay que repartir entre 18 en la Liga BBVA, las cifras no se van a engordar mucho más allá y las diferencias apenas diferirán de las que ya existen, manteniéndose casi intacto el orden de "escalones" anteriormente expuesto.

Ante esta situación, la cabeza visible de los clubes que protestan (inicialmente los 7 que diferían, actualmente aumentado a unos 15), el presidente del Sevilla FC, José María del Nido, está estudiando diferentes posibilidades para igualar estos repartos considerados, de base, injustos. De hecho, tiene convocada una reunión para la jornada del jueves 8 de septiembre con estos 15 clubes que apoyan la petición (Atlético de Madrid y Valencia CF, del "segundo peldaño", incluidos) en el Estadio Ramón Sánchez Pizjuán para estudiar qué medidas proponer a la Liga de Fútbol Profesional en la próxima asamblea. En el caso de que propongan una suspensión del contrato firmado para el periodo 2014-2020, según diferentes fuentes, implicaría el abono de una cláusula de anulación que sale a aproximadamente 20 millones de euros por club. A la vez, algunos medios también confirman que Real Madrid CF y FC Barcelona, no llamados en ningún momento para la reunión, están descontentos con la misma. Hay que esperar a que se produzca y se propongan soluciones para hacer más igualitario el reparto de los ingresos.

3. Los horarios, la exportación de la Liga al mercado internacional y el problema con el fútbol base

Una polémica surgida debido a los contratos de los derechos de imagen de la Liga BBVA y la Liga Adelante con los clubes y la organización de LFP. Los vigentes y los futuros incluyen una cláusula que dictamina la libertad de decisión del horario de los partidos dentro de las fechas estipuladas por el calendario de la RFEF sorteado en el mes de julio de cada año, lo cual viene a confirmar que los horarios de los encuentros son escogidos por el tenedor de los derechos y no por la LFP. Este año, intentando vender el producto de la Liga BBVA al mercado asiático y, a la vez al americano, y para no tener competencia directa con Serie A y con Premier League, los horarios de las jornadas de Liga BBVA han variado con respecto a los que veníamos a estar ya habituados en pasadas campañas. Se disecciona el turno de los domingos a las 17:00, donde se aglutinaba la mayor parte de los encuentros, colocando partidos los domingos a las 16:00, a las 18:00, a las 20:00 (aunque este horario puede ser cambiado en los próximos meses por parte del operador de televisión), a las 22:00 y a las 12:00. Estos dos últimos horarios son los que han producido la queja. El caso de los domingos a las 22:00 perjudica a los propios aficionados españoles que pueden ir en menor medida a los estadios debido a la proximidad de la jornada laboral de los lunes. Incluso, la Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios ha hecho ya oficial su petición de adelantar los horarios de eventos deportivos de interés a una hora anterior a las 22:00.

El horario de las 12:00, empleado en busca de exportación de la Liga en Asia, es el que ha generado mayor la polémica. Tradicionalmente, el horario de los domingos al mediodía ha sido empleado para el partido televisado en cerrado de la Segunda División y para el "grueso" de cada jornada de la Segunda División B, la Tercera División, demás categorías inferiores y el fútbol base, los cuales cobraban protagonismo en este horario libre de fútbol de la máxima categoría. Sin embargo, ahora, con este nuevo horario de la Liga BBVA, todos estos encuentros quedan en un segundo plano mediático en España y prácticamente olvidado fuera de las fronteras. Por ello, las Federaciones Territoriales que conforman la Real Federación Española de Fútbol protestaron en la asamblea del pasado 31 de agosto para que se arreglase este tema, llegando incluso a amenazar con una huelga indefinida. En esa asamblea, RFEF especificó a los clubes que no son ellos los que programan las jornadas y que no pueden intervenir debido a la cláusula de libertad de horarios. Y por no tener nada que ver, RFEF tampoco podía reportar algún tipo de beneficio económico a los clubes de estas categorías por verse relegadas al segundo plano. Cristóbal Sánchez, presidente del Lorca Atlético (de Segunda División B) especificaba estos términos en una intervención en Radio Marca el pasado día 31, por la noche, en la visita a su estadio del Sevilla FC en un partido amistoso benéfico por el terremoto que destruyó parcialmente el municipio murciano. De forma no textual venía a reconocer que los clubes de estas categorías habían comprendido la postura de RFEF de total impotencia ante el contrato televisivo vigente y no habían llevado a cabo ningún tipo de medida de protesta, reconociendo que si el horario de las 12:00 sigue por mucho tiempo, el fútbol de sus categorías podía quedar prácticamente fuera del foco mediático.

4. Las radios y el cambio en la forma de acreditarse a los partidos

El último de los temas que hacen que el comienzo de la temporada del fútbol en España esté resultando polémico. Durante el verano de 2011, el tenedor de los derechos de imagen de los clubes, Mediapro, basándose en una cláusula incluida en los contratos de televisión de los equipos en los cuales había pasado prácticamente inadvertida, decidió cambiar la manera de acreditación de los medios radiofónicos para los partidos. Estaban legitimados a ello, ya que los clubes habían firmado una cláusula en sus contratos que así lo permitía. Lo podemos ver en un extracto del contrato televisivo del Valencia CF, firmado en 2009, al que el blog La Paradinha ha podido tener acceso. Dictamina lo siguiente:

"5.3. La cesión por parte del CLUB a MEDIAPRO de los derechos de reproducción, sincronización, distribución, grabación y comunicación pública de los partidos en la modalidad radiofónica, en los términos luego definidos, y el de utilizar y autorizar a terceros el uso de las cabinas radiofónicas del que en cada momento sea el estadio del Valencia, C.F. cuando juegue como equipo local y demás instalaciones del CLUB, las cuales se pondrán a disposición de MEDIAPRO o de las emisoras o cadenas que ésta designe."

Al parecer, todos los clubes han comprobado que en sus contratos con el operador figura una cláusula igual o parecida en la cual ceden al operador de televisión el control del sector radiofónico en lo que a los clubes respecta. Este operador en verano decide cambiar la forma de acreditarse a los estadios varíe con respecto al que siempre ha existido, acordando con la LFP (que son los clubes con los que ha firmado el contrato televisivo en particular) la creación de un canon que hace que las emisoras de radio públicas o privadas de España u otros países tengan que pagar para poder conseguir acceder a los estadios y, por consecuencia, trabajar como medio radiofónico.

Las radios se han negado mayoritariamente en rotundo, alegando que esa cláusula de los contratos en la que los operadores de televisión pueden obligar a pagar cuando nunca se ha hecho así atenta contra el Derecho a la Información que figura en la Constitución. La Asociación Española de Radiodifusión Comercial (AERC) en la que se encuentran las grandes emisoras del país como SER, RNE o Radio Marca, entre otras, no tienen intención de pagar el canon. Entienden que el fútbol ha crecido en el país gracias a la radiodifusión, ya que casi forma parte de la cultura española el hecho de que las ondas estén dominadas por el fútbol cada fin de semana; y que ha sido el método que lo ha integrado en España. Un ejemplo que han puesto en alguna ocasión para mostrar lo importante que ha sido la radio para el fútbol es la difusión del Mundial de la FIFA de Brasil 1950, donde España consiguió su segundo mejor resultado histórico (4º puesto) y el cual sólo se pudo seguir mediante la radio en el territorio nacional, ya que la televisión casi no había llegado a España en ese periodo histórico de posguerra. Añaden que el fútbol no hubiese tenido jamás la acogida que tiene hoy día sin ese trabajo de las radios en aquella época que ha ido teniendo continuidad hasta nuestros días.

Ya que las radios no se acreditan –previo pago– a través de la Liga de Fútbol Profesional, los clubes que la forman, amenazados en algunos casos con retiradas de parte de los ingresos que perciben por parte del operador de televisión con quien tienen firmado su contrato, porque al fin y al cabo, no deja de ser un incumplimiento parcial del mismo, impiden el acceso a los estadios como prensa radiofónica a los narradores y comentaristas cuyas emisoras no hayan pagado el canon.

Como parte del descontento por los contratos televisivos de ciertos equipos que antes mencionaba, algunos clubes meditan e, incluso, han llevado a la práctica, un incumplimiento de esta cláusula. El Sevilla FC fue el único club que en la segunda (primera) jornada de todo el fútbol profesional español dejó pasar libremente a las radios para que pudiesen realizar su trabajo. Desde entonces, se han rumoreado diferentes multas: una posible de 100.000€ por parte de la propia LFP como organismo, otra de una reducción del 30% en el contrato televisivo por parte del operador Mediapro, y otras de incluso entre 2 y 6 millones a los clubes que decidan imitar al club hispalense. Todavía no se ha oficializado ninguna. Real Betis y Villarreal CF, e incluso rumores apuntaban también a Málaga y Nàstic de Tarragona, estaban en un principio barajando la posibilidad de imitar al club dirigido por José María del Nido, pero tras analizar los contratos han dado un paso atrás. Fernando Roig, presidente del Villarreal CF, confesaba en unas declaraciones esto mismo, que su intención era dejar pasar a las radios, pero que tuvo que retractarse de su intención al descubrir esta cláusula que desconocía que tenía en el contrato.

Por esta línea va dirigido el pensamiento de los presidentes de otras muchas entidades. De hecho, no todos los clubes que tienen cedidos sus derechos a Mediapro desconocían la existencia de esta cláusula en sus respectivos contratos. Carlos Suárez, presidente del Real Valladolid, exponía hace poco en una entrevista al programa "Directo Marca Valladolid" que emite Radio Marca a nivel local que, en su caso particular, conocían la existencia de la cláusula pero que el tenedor de los derechos no les había comunicado hasta este verano su voluntad de cambiar la manera de acreditación de las radios, acción para la cual están amparados por la inclusión de esta cláusula, añadiendo también que las emisoras de radio conocían o deberían conocer la existencia de esta cesión que los clubes hacen a Mediapro en el contrato y que en cualquier momento Mediapro podría plantearse, como ha sido el caso, hacer uso de la misma.

La AERC incluso se ha reunido en alguna ocasión recientemente para intentar tomar medidas legales por medio de la justicia ordinaria para eliminar esta cláusula por considerar que toma por igual a la televisión que a la radio y que atenta contra el Derecho a la Información. Al parecer, el operador de televisión introduce esta cláusula en los contratos al entender que la radiodifusión de los partidos genera beneficios económicos a las radios (ingresos publicitarios) a su costa. De ahí la defensa de las radios sobre que no es tan "a su costa" ya que el fútbol en España no hubiese tenido tanto calado sin ellos y, por tanto, las televisiones no se habrían interesado tanto por el fútbol como hacen actualmente.

Por el momento, en este aspecto, la situación sigue bloqueada. Algunos delegados de clubes confiesan incluso a los periodistas a los que deniegan el acceso su descontento con la medida, pero también añaden que si no la acatan, la sanción podría ser muy dañina para los clubes. Las radios parecen contar con una gran parte del apoyo popular, el cual se manifiesta en las redes sociales, donde, por ejemplo, en Twitter, es frecuente toparse durante los últimos fines de semana con la etiqueta #noalfútbolsinradio como medida para mostrar su descontento. Por ahora, este tema sigue encallado, y por ahora ninguna emisora de radio que no haya pagado el canon puede acceder a los campos de Liga BBVA y Liga Adelante en España.

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